
Momento de la expulsión de Aitor. (LALIGA)
Aleix Valero | La expulsión de Aitor Sanz después de no saber leer los dos últimos minutos de la primera parte y un error (otro más) puntual de Sipcic en defensa, provocaron que el CD Tenerife se viniera de vacío de Montilivi, donde solo ha ganado en aquel recordado ascenso de 2009, y prolonga la mala racha de los blanquiazules que, una semana más, se ven amenazados por los puestos de descenso, tras siete jornadas sin ganar.
Cristian Stuani no desaprovechó el error de Sipcic, pasado de vueltas ante Samu Saiz al que derribó de manera tan clara como innecesaria dentro del área, para cometer un penalti que supondría el triunfo de los de José Luis Martí (1-0), en la primera ocasión en la que el balear se enfrentara a su ex equipo, al que estuvo a un gol de llevar a Primera División.
Seis de seis para Martí en dos jornadas en Girona, mientras que el crédito de Garai ya pasa a ser una bancarrota nada fácil de solventar, con un equipo condenado por errores propios y lectura de partido, sin capacidad para cambiar nada, ni desde dentro, ni desde el banquillo.
Con Carlos Ruiz siendo atendido con una brecha al filo del descanso, los tinerfeños no fueron capaces, y pudieron, de tirar el balón fuera del campo, interrumpir el juego, o hacer cualquier cosa para volver a estar once contra once. Lo aprovechó el Girona con una jugada a la zona de centrales donde no estaba Ruiz, y Aitor Sanz derribó a Stuani, siendo expulsado de manera directa, en una primera mitad con tres tiros a los postes (dos los locales y uno el Tenerife).
Aunque estaba previsto que Shaq Moore ocupara el lateral zurdo sin Isma López (decisión técnica) y Robert Mazán (sancionado), la baja de última hora de Luis Pérez durante el calentamiento previo, hizo que el americano ocupara su posición natural. La zurda fue para el central Álex Muñoz mientras que Carlos Ruiz y Sipcic formaron como centrales.
Además el técnico dispuso un doble pivote con Aitor Sanz y Luis Milla y, delante de ellos, Borja Lasso. Quien finalmente fue descartado y no se recuperó fue Álex Bermejo, que vio el partido desde la grada por una sobrecarga muscular, mientras que Dani Gómez disfrutaba de su segunda titularidad consecutiva.
En el rival Martí y el Girona jugaron toda la semana al despiste con la lesión del goleador Stuani, que finalmente fue de la partida, mientras que Maffeo fue la elección en el lateral derecho en lugar de Jordi Calavera.
La salida del Girona fue asfixiante, al punto de tener Borja García (5’) una oportunidad clarísima para poner en ventaja a los suyos, pero su disparo raso y seco se estrelló en el poste tinerfeño.
Parecieron espabilar los visitantes, que empezaron a acumular posesiones largas volcando el juego a su derecha. En una de estas, Moore (10’) llegó a línea de fondo para centrar raso, pero el disparo de primeras de Dani Gómez lo rechazó a córner el central Alcalá. El poste volvió a ser protagonista a los 15 minutos, pero en esta ocasión para evitar el gol del Tenerife a un centro cerrado de n en unos muy buenos minutos de los insulares, que amasaban un 68 % el tiempo el balón.
Álex Gallar, a los 20, también lo intentó desde fuera, pero Ortolá, bien posicionado, no tuvo problemas en atajar el lanzamiento. Los de Martí recuperaron el mando y, en apenas un minuto, tuvieron dos clarísimas para adelantarse. Primero con un testarazo (29’) de Stuani que salió fuera por poco, con Ortolá superado, y después (30’) con un centro- chut de Jairo Izquierdo, que se encontró con la madera.
Llegó una jugada clave antes del descanso. Con Carlos Ruiz sangrando y siendo atendido, por lo tanto el equipo con uno menos con el balón en juego, el Tenerife jugaba descolocado y Stuani ganó la espalda a Aitor Sanz, que derribó al uruguayo siendo el último hombre. No dudó el colegiado en mostrar la roja directa al madrileño (43’), que dejó con diez a los insulares tras una jugada que venía de un encontronazo de Alcalá con Carlos Ruiz en un saque de esquina con falta del local, pero que dejó noqueado al blanquiazul.
Quiso aprovechar la ventaja Martí dando entrada a Samu Saiz, atacante, para dejar en la caseta al lateral zurdo Mojica, mientras que Undabarrena y Alberto, en lugar de Malbasic y Carlos Ruiz, fueron los movimientos al descanso de Garai, que quiso tapar al equipo. Dos líneas de cuatro, con Alberto y Sipcic como centrales y Milla y Undabarrena como pivotes; las intenciones de ambos quedaban claras.
Pero se le pudo venir abajo la idea a Garai si Stuani (46’) al poco de sacar de centro, llega a acertar a batir a Ortolá ante el que se quedó solo colándose entre Sipcic y Alberto, despistados. El propio uruguayo (49’) se encontró con los pies de Ortolá en una segunda parte con el Tenerife encerrado en su área, aguantando el chaparrón. El portero ganaría protagonismo y no se podría permitir errores. Samu Saiz (51’) y Gumbau (57’) no pudieron batirle con sendos disparos sin excesivas dificultades para el cancerbero.
Pero tanto iba el cántaro a la fuente, que terminó por romperse, y de nuevo en una mala decisión individual. Nikola Sipcic derribó de manera infantil dentro del área a un hábil Samu Saiz, y Stuani, desde los once metros, no perdonó a pesar de que Ortolá adivinó la intención del uruguayo (1-0, 62’). El partido se ponía imposible para los de Garai.
Dominaba de manera inapelable el Girona, con un Tenerife metido en campo propio, desquiciado por momentos, desconectado desde la expulsión de Aitor Sanz. Las llegadas de los locales eran constantes, merodeando el peligro. Ramalho (73’), desde dentro del área, estuvo cerca de marcar y Garai agotó cambios retirando al único delantero, Dani Gómez, para dar entrada a Suso (75’), que ocupó ese mismo lugar buscando alguna jugada de velocidad de manera aislada.
Pudo llegar dos minutos después cuando el capitán, desde la izquierda sirvió a la llegada de Shaq Moore que le ganó la espalda a Jairo, pero conectó de manera defectuosa frente a Juan Carlos, en la mejor oportunidad visitante.
Con todo perdido tiró de valor al menos el Tenerife para intentar el imposible. Diamanka (83’) colaboró al cabecear hacia su propia portería un centro de Milla que pudo ser gol, pero de ahí al final, con el Tenerife volcado, el Girona dispuso de varias llegadas claras que no fueron gol por los pelos.
FICHA TÉCNICA
Girona (1): Juan Carlos; Maffeo, Ramalho, Alcalá, Mojica (Samu Saiz, 46’); Gumbau (Diamanka, 66’), Granell; Álex Gallar, Borja García (Jonathan Soriano, 75’), Jairo; Stuani.
Entrenador: José Luis Martí.
CD Tenerife (0): Ortolá; Moore, Sipcic, Carlos Ruiz (Alberto, 46’), Álex Muñoz; Aitor Sanz, Milla, Borja Lasso; Nahuel Leiva, Dani Gómez (Suso, 75’) y Malbasic (Undabarrena, 46’).
Entrenador: Aritz López Garai.
Goles: 1-0 (62’) Stuani, de penalti.
Árbitro: Iosu Galech Apezteguía (comité navarro). Asistido en las bandas por Alonso López y Estévez Iglesias. Árbitro de VAR: Saúl Ais Reig. Amonestó a los locales Gumbau (34’) y Jairo (84’); y a los visitantes Moore (18’), Dani Gómez (52’), Ortolá (56’), Milla (68’), Álex Muñoz (77’) y Undabarrena (89’). Expulsó con roja directa (43’) a Aitor Sanz por derribar a Stuani siendo el último defensa.
Incidencias: Partido correspondiente a la 15ª jornada, disputado en Montilivi, Girona, ante 7.013 espectadores. El CD Tenerife vistió con su indumentaria pistacho. El Girona lo hizo con pantalón rojo y camiseta a rayas verticales rojas y blancas.